miércoles, 30 de septiembre de 2020

POLÍTICA SINDICAL Y LAS TAREAS DEL PARTIDO

 


La política sindical es una parte importante de la línea política del Partido aplicada a la conducción del movimiento obrero y de los trabajadores en general.

 

La aplicación de una correcta y clara política sindical de clase ejerce una poderosa influencia en el desarrollo de las luchas de la clase trabajadora contra la explotación capitalista, desarrolla su conciencia de clase, esclarece todo lo referente a su enemigo de clase, contribuye a su organización, ya sea para la lucha reivindicativa, así como para su combate político contra la burguesía, indicándole que el verdadero objetivo de su lucha es conquistar el Poder político.

 

Nuestra política sindical se desprende de la línea política general del Partido, que caracteriza a nuestro país como un sistema capitalista dependiente del imperialismo, en especial del imperialismo yanqui, con algunas relaciones pre-capitalista que se dan en la pequeña producción mercantil, predominando la gran empresa monopólica nacional que genera el 80% de Producto Interno Bruto, apropiándose indebidamente de trabajo del proletariado chileno sometiendo al pueblo a bajísimas condiciones de vida. En que el Estado burgués chileno juega un importante rol en la reproducción capitalista, en la concentración y centralización del capital, en el saqueo de las riquezas básicas del país que hacen las multinacionales.

 

Nuestra propuesta para salir de este estado de dependencia, terminando a su vez con la explotación capitalista, es desarrollar desde el seno del pueblo un vasto movimiento político social a través del “Movimiento Justicia Social” junto con la acción activa del mundo sindical para emprender en una primera etapa la conquista de un gobierno popular democrático nacional antiimperialista. 

 

POLITICA SINDICAL CLASISTA

 

La política sindical clasista tiene la finalidad de desarrollar la lucha de clases en todos los frentes contra la explotación capitalista, estos son:

 

1.- Frente Ideológico

En nuestra actual sociedad capitalista la ideología que prima es la ideología de los explotadores, de los capitalistas, es decir, de la burguesía en la cual esta inmersa los trabajadores y el pueblo en general, la que a través de la historia de la sociedad capitalista ha venido inculcando sus valores “democráticos”, su derecho a la propiedad privada de los medios de producción para seguir explotando a la clase obrera,  con los medios de comunicación y la educación que controlan, promueven la armonía entre el capital y el trabajo, el apoliticismo, el respeto a la institucionalidad burguesa y sus valores morales, el individualismo contra el sentido colectivo de la clase obrera dividiéndola al denominar a un sector de ésta “como la nueva clase media” de acuerdo a los ingresos que perciben. Por su parte sectores pequeños burgueses propagan ideas extrañas a los intereses del proletariado que atentan contra la unidad del movimiento sindical.

 

Los Comunistas Revolucionarios tenemos que dar una ardua lucha en el terreno ideológico por liberar al proletariado de la influencia de la ideología burguesa y todas las ideas extrañas a la ideología proletaria, que promueven la conciliación se clase, el populismo y el reformismo. Lo haremos desarrollando su conciencia de clases para que comprendan que los proletarios son aquellos que deben vender su fuerza de trabajo al explotador burgués y que sus intereses como clase son totalmente opuestos a los intereses del explotador, que su rol es terminar con el poder burgués. Debemos contrarrestar la propaganda de las ideas burguesas y difundiendo el marxismo-leninismo, ideología del proletariado que nuestro Partido ha adaptado correctamente a la realidad de nuestro país.

 

2.-Frente Sindical

La clase trabajadora para librar la lucha por sus reivindicaciones socioeconómicas debe permanecer unida para enfrentar a la burguesía, por tal motivo es que, desde el inicio del capitalismo en Chile, después de años de cruel explotación, el proletariado comprendió la necesidad de organizarse. Las primeras organizaciones fueron las Mancomunales Obreras fundadas a fines del siglo 19 pasando posteriormente a la constitución de sindicatos por la acción organizadora de Luis Emilio Recabarren quien fundo la Federación Obrera de Chile (FOCH) dándole un sentido de clase al movimiento sindical chileno.

 

La burguesía al no poder impedir la unidad y organización de los trabajadores ha pretendido encerrar a estos en una maraña de leyes y reglamentos que forman el Código del Trabajo, fomentando la formación de varios sindicatos en una misma empresa para dividir y quebrar el espíritu de lucha de los trabajadores. Leyes antisindicales como la “nueva ley laboral” aprobada por los partidos de la Nueva Mayoría junto con la derecha obliga a los sindicatos a dejar “Turnos de Emergencia” o “Servicio Mínimo” durante las huelgas, así como los “Grupos Negociadores” integrado por trabajadores que aceptan la presión patronal para quebrar la negociación colectiva del sindicato.

 

La llegada del Covid-19 le ha permitido a la clase explotadora, la burguesía, a la derecha, al gobierno de Piñera,  limitar la movilidad de  la población manteniéndola encerrada en sus casas he inmovilizadas para protestar contra las medidas económicas y antisindicales que lleva a cabo contra los trabajadores que en tiempos normales le hubiese sido imposible de aplicar, como son las rebajas de salario, despidos generalizados, el teletrabajo con el cual no es necesario tener a los trabajadores encerrados en locales de la empresa, estos realizan su labores desde sus propios hogares, rompiendo la unidad de acción sindical. Sobre todo, que los trabajadores obligar a los trabajadores a solventar la cesantía con sus propios ahorros por medio del seguro de cesantía y el retiro de los fondos de pensiones, etc.

 

 El gobierno de Piñera se ha dedicado a proteger los intereses de los grandes empresarios desprotegiendo a las pequeñas empresas las que han ido a la quiebra perdiéndose importantes fuentes de trabajo que no se podrán recuperar de continuar con el sistema económico de libre mercado, quedando cesantes dos millones de trabajadores los que en parte han tenido que realizar actividades informales para poder subsistir con su familia.

 

La desprotección que viven actualmente los trabajadores también se debe al control del  movimiento sindical a manos de los llamados partidos de centro izquierda: PDC-PS-PC que hicieron de la CUT  una oficina de relaciones laborales de los gobiernos de la Concertación y Nueva Mayoría, lo que provocó el alejamiento de los sindicatos más combativos alejándose cortando con la burocracia sindical, llevando algunos una vida independiente del resto del mundo sindical,  otros influenciado por teorías ajenas al proletariado promueven la formación de centrales paralelas a la CUT debilitando el movimiento sindical en vez de fortalecerlo.

 

El Partido Comunista Revolucionario promueve ampliar la participación de los trabajadores en los sindicatos restableciendo la democracia sindical y darle una dirección combativa de clase, para lo que es necesario terminar con la influencia burguesa que avalan los burócratas que controlan la CUT y que siguen las políticas económicas reformistas y la conciliación de clase de sus partidos. El Partido debe expresar con mayor exactitud y precisión las reivindicaciones de la clase trabajadora, debemos ser los primeros en la defensa de sus intereses económicos y sociales, coayudar a su organización, en la elaboración de plataformas de lucha, en el conocimiento de la legislación laboral, en la determinación del mejor momento para ir a la huelga y por último en las formas de lucha. Sobre todo mantener su independencia de clase frente al Estado, a los patrones y a los partidos políticos de Derecha que defienden a los explotadores burgueses. Así como de los partidos de centro izquierda (Socialdemocracia) que no están por terminar con el capitalismo, por el contrario, están para acomodar el Estado a los intereses del sector industrial y comercial de la burguesía media, de la pequeña burguesía y la aristocracia obrera.

 

3.- En el Frente Político

Los explotadores burgueses temen la participación de los trabajadores en la política contingente, dicen que la política crea discordia entre el capital y el trabajo, que incita a los trabajadores a hacer demandas salariales y sociales más allá de la situación económica del país, es decir, de las que quieren dar los patrones. Pero los resultados económicos nos muestran el grado de explotación que los trabajadores son sometidos en estos últimos 30 años, fabulosas ganancias han obtenidos los grandes grupos económicos del país. En plena crisis económica Covid-19 han repartido entre sus accionistas las ganancias obtenidas en 2019.

 

Si bien los trabajadores individualmente participan en la vida política del país cada cierto tiempo en las campañas electorales adhiriendo a uno u otro candidato, llevados por las promesas de estos o por los programas de partido, no aceptan que el sindicato sea  influenciado por partidos políticos, este apoliticismo solo beneficia a los explotadores burgueses porque le permite mantenerlos encerrados en el tema netamente salarial., al cual contribuyen también los partidos políticos de centro izquierda (socialdemócratas) los que con sus reformas no logran disminuir el grado de explotación de los trabajadores, o por sus promesas incumplidas y la utilización que hacen de los sindicatos a favor de obtener mayor participación en la administración del Estado burgués.

Esta visión generalizada de los trabajadores de que el sindicato solo tiene por objetivo aunar a los trabajadores en base a sus intereses económicos, enfrentándose a la parte patronal a lo menos una vez al año para fijar nuevas condiciones de trabajo y aumento salarial, actuando el Estado como mediador cuando ambas partes no lleguen a un acuerdo, ha permitido a lo largo de los años a los burgueses mantener la explotación salarial, el régimen político y el Estado burgués, su dictadura de clase sobre el proletariado, los trabajadores y el pueblo.

 

El mundo obrero hoy en día sabe que existe la posibilidad cierta de derrotar al capitalismo, esta posibilidad la dieron Carlos Marx y Federico Engels cuando elaboraron hace 150 años atrás El Manifiesto Comunista que permitió a la clase obrera rusa, unida al campesinado llevar acabo la Gran Revolución de Octubre dirigida por V.I.Lenin y construir el Socialismo en la URSS bajo la dirección de José Stalin.

 

La caída del campo socialista ha sido un retroceso en la lucha del proletariado mundial por terminar con la explotación capitalista, confundiendo a los sectores más atrasados políticamente de los trabajadores, en especial al proletariado de nuestro país que sufrió los efectos de una cruel dictadura que cortó el cordón umbilical del nuevo mundo sindical post dictadura con el antiguo, debiendo los nuevos dirigentes rearmar el movimiento sindical con un nuevo proletariado criado en dictadura sin experiencia de las grandes batallas de sus padres y abuelos dieron por conquistar el Poder Político, que la nefasta acción de la burocracia sindical adherente a la socialdemocracia ha mantenido a éste ajeno al acontecer político nacional.

 

Romper con el apoliticismo de los trabajadores dependerá de la labor del Partido en los sindicatos, en el movimiento obrero, para que comprendan que somos su Partido, su vanguardia política, diferente a los partidos socialdemócratas y burgueses, que estamos para unir los principios del Socialismo con el movimiento obrero, para lograrlo debemos primero luchar codo a codo con ellos en la defensa de sus intereses más inmediatos, pero fundamentalmente elevando su conciencia de clase. Que en  su lucha  contra el capitalismo no basta con participar individualmente en forma ocasional en la política nacional, su fuerza como clase está en su masa, en su organización para imponer a través de la paralización de faena sus demandas económicas, pero deben tener claro que ninguna lucha económica por si sola puede aportarle un bienestar estable, si no se integra a la lucha política del resto de la sociedad para exigir mayores garantías democráticas y sindicales, termino de la brutalidad policial que se ejerce contra las manifestaciones públicas de la población, libertad de presos políticos, respeto a la actividad sindical, derogación de leyes antisindicales, cambios en la  política económica de los gobernantes burgueses. Actividades que salen del ámbito económico, convirtiéndose en actos políticos. El Partido debe unir siempre en una sola las luchas del proletariado, sus demandas económicas con la lucha política por determinar el tipo de sociedad queremos.

 

4.- Formas de luchas

El objetivo final de nuestra política sindical es organizar y dirigir la lucha del proletariado por conquistar el Poder Político para construir una sociedad más justa. Como hemos visto esta se compone de la lucha económica contra el capitalista o grupos de capitalistas y la lucha política contra el gobierno burgués por ampliar los derechos democráticos y políticos del proletariado, siendo la huelga su principal forma de lucha.

 

La Huelga que nace de la propia naturaleza de la sociedad capitalista, significa el comienzo de la lucha del proletariado contra los capitalistas. La huelga es una escuela de guerra en la cual el obrero conoce realmente quien es su patrón y a quien sirve el Estado, en la que adquiere una conciencia revolucionaria que infunde siempre tal espanto a los capitalistas porque de una simple huelga, por pequeña que sea, puede ser el comienzo de una insurrección popular que significa el término de su dominio de clase. En efecto, cuando los obreros dejamos de hacer funcionar la maquinaria de producción y distribución capitalista, les decimos al explotador que somos nosotros los verdaderos dueños de la producción, derechos que proclamamos cada vez con mayor fuerza con cada huelga que realizamos, más aún cuando estamos organizados sindicalmente por rama de producción, en federaciones, confederaciones en una Central Única de Trabajadores que va más allá de una mejora salarial, que se integra a cada una de las luchas políticas de la población por cambios democráticos, por la instauración de una Democracia Popular.

 

 

LAS TAREAS DEL PARTIDO EN EL MOVIMIENTO SINDICAL

 

1.- Difundir y explicar la línea sindical del Partido y hacer comprendan que estamos por la defensa de sus intereses de clase, que somos el Partido del proletariado y de las más amplias masas trabajadoras.

 

2.- Fortalecimiento de los sindicatos, su democracia sindical, su conciencia y disciplina de clase de sus afiliados, necesaria para enfrentar a la patronal en defensa del trabajo y de sus sueldos y salarios.

 

3.- Contribuir a la formación de nuevos sindicatos, principalmente en las nuevas actividades laborales (Delivery, Teletrabajo) que han surgido como resultado de la crisis económica y del Convid-19.

 

4.- Organizar a los trabajadores que están y serán despedidos, cuando se levante la cuarentena total en el país, en Comité de Cesantes.

 

5.- Promover la solidaridad de clase, todo trabajador debe estar dispuesto a apoyar las luchas reivindicativas que lleven a cabo otros trabajadores de su misma industria o empresa, así como las que realizan otros centros de trabajo, sea esta ayuda económica, manifestaciones de apoyo, funas etc.

 

6.- Rescate de la Central Unitaria de Trabajadores–CUT del control de los burócratas sindicales militantes de los partidos socialdemócratas y revisionistas, e implantando el principio de la lucha de clase trazado por Luis Emilio Recabarren.

 

 

 

¡¡LA LUCHA DA LO QUE EL EXPLOTADOR!!

¡¡Y EL GOBIERNO NIEGAN!!

 


PARTIDO COMUNISTA REVOLUCIONARIO DE CHILE

SEPTIEMBRE 2020